El día en que Paul McCartney y John Lennon tocaron juntos por primera vez
Los dos Beatles se conocieron en una fiesta parroquial y enseguida se sintieron cómodos juntos. Unos años después, Liverpool vio nacer a la banda que cambió el rumbo de la música.
Nadie podía imaginar lo que iba a pasar en los siguientes cinco, diez, quince o en los 65 años que vendrían después de aquel 6 de julio de 1957, el día en que Paul McCartney y John Lennon conversaron por primera vez y tocaron juntos algunas canciones.
Hace 65 años que la dupla compositora más exitosa e influyente del siglo XX y, posiblemente una de las más trascendentes de todos los tiempos en la música, unió sus virtudes y cruzó sus miradas por primera vez. Desde entonces, hubo un antes y un después. Aquel día, sin que ese John de 17 años ni aquel Paul de 15 se dieran cuenta, plantaron una semilla de la que germinaron Los Beatles.
Paul McCartney y John Lennon: fiesta de verano y mucho “skiffle”
Para aquellos años, fines de la década del 50, el rock and roll ya comenzaba a pisar fuerte en los Estados Unidos con Elvis Presley. Sin embargo, del otro lado del Atlántico, los británicos estaban a full con una música algo más light llamada “skiffle”. Ese era el estilo que tocaban más de 40.000 bandas juveniles por entonces y una de ellas era liderada por John Lennon: The Quarrymen.
Y el grupo de John era uno de los que animaría la fiesta popular en la parroquia St. Peter, en Woolton, suburbio de Liverpool, en ese veraniego sábado 6 de julio. Como toda celebración parroquial, había venta de comida y bebida, juegos tipo kermesse, artesanías y, claro, un baile, con músicos invitados para tal ocasión.
El quinceañero Paul McCartney, quien a veces tocaba el piano en la iglesia y quería ser parte del coro -aunque ya lo habían rechazado un par de veces-, fue a la fiesta junto a su compañero de escuela, Ivan Vaughan, quien eventualmente tocaba con The Quarrymen. Él presentó a Paul y a John.
Pero antes, McCartney había visto un rato del show y quedó impresionado con la personalidad más que con la calidad musical del líder de ese grupo de skiffle, John Lennon, quien era puro atrevimiento: pifiaba una nota y lo resolvía; se olvidaba parte de una letra y la inventaba. El conservador Paul lo admiró enseguida.
Luego del concierto, cuando efectivamente fue la presentación formal, se invirtieron los roles y fue el turno de McCartney de impresionar: afinó su guitarra y le enseñó a Lennon como hacerlo; comenzó a cantar algunos clásicos de estrellas de la época como Eddie Cochran, Gene Vincent y Little Richard; y mostró una calidad como cantante que nadie en The Quarrymen tenía. El rebelde John lo admiró enseguida.
Paul McCartney y John Lennon: una dupla que empezó a funcionar
“Recuerdo que llegué a la fiesta y escuché esa música magnífica que salía de los pequeños altavoces Tannoy. Eran John y su banda. Me quedé asombrado y pensé ‘Oh, es genial’. John era bueno, realmente el único miembro del grupo que se destacaba”, contó décadas después Paul McCartney.
El sentimiento fue recíproco, porque Lennon sintió que aquel chico de 15 años debía sumarse a The Quarrymen, aunque le quedaba una duda: si lo invitaba, el grupo crecería, pero él, Lennon, tendría una fuerte competencia en su liderazgo. Aun así, primó el jugársela por tocar juntos e intentar hacer buena música por encima de cualquier vanidad.
Y dos semanas después, llegó la convocatoria. La semilla de aquel histórico 6 de julio de 1957 empezaba a mostrar su primer brote que con el tiempo se transformaría en un árbol del que salieron muchas de las mejores maderas de todos tiempos.
Tocaban canciones de otros, que a Paul le salían con extrema facilidad, mientras que Lennon seguía profundizando su carisma y verborragia sobre el escenario. Luego, comenzarían a animarse con sus propias composiciones y también a trabajar juntos letra y música, colaborando estrechamente entre ambos.
Enseguida, McCartney llevaría a la banda a un amigo suyo que tocaba bastante bien la guitarra, pero tenía solo 14 años, algo que a Lennon no le cerraba: George Harrison. Pero lo aceptó igual, porque hacía los punteos de guitarra como ninguno de ellos lo podía lograr. Así, de a poco, The Quarrymen fue desapareciendo para darle lugar a The Beatles, que debutaron en 1960, en Hamburgo. La semilla había echado raíces para siempre.
#ELSIESTERO, Historias y anécdotas de las mejores Bandas del Mundo, Domingos de 17.00 hs. a 18.30 hs. 105.1FM www.fmsos.com.ar